2- El engaño yace a la vuelta de la esquina.

A lo largo de nuestra vida, aveces sin quererlo o sin siquiera saberlo comenzamos una búsqueda “llamada espiritual”, algo que nos señale el camino y que nos explique el ¿por qué? y ¿para qué? estamos en este mundo; posibles respuestas para todas nuestras preguntas.
Con el afán de descubrir algo maravilloso que nos llene en un cien por ciento, escarbamos en todas las oportunidades que se nos presentan e incluso forzamos opciones que no se nos presentan naturalmente.
Todo esto con un único objetivo que es sentirnos completos, radiantes, con dicha , felicidad eterna y quien sabe que otras cosas mas.
Hay quienes viven toda su vida creyendo fielmente en la “verdad” que nos fue transmitida en nuestra infancia, la cual reafirmamos sin cesar hasta el fin de nuestros días. Y es así que tanto Musulmanes, Cristianos, Judíos, Indues, viven y mueren creyendo tener la verdad. Otros mas osados ponen en tela de juicio lo que ya le dieron sus antepasados ya digerido como la verdad del universo y se atreven a realizar su propia búsqueda. Un porcentaje x de estos se conformaran con cualquier cosa menos lo que les fue enseñado. Otros sinembargo probaran diferentes doctrinas hasta llenar totalmente su vida con el camino elegido. Y es aquí donde se suele cometer el terrible error de quedar enceguecido, embelesado por esta opción que como es la que nosotros hemos elegido no somos capaces de cuestionar ni de poner a prueba por mas de un segundo, proyectándola sobre nuestras vidas como la salvación sin ningún tipo de cuestionamiento. Y es aquí que muchos están exactamente como al principio con la gran diferencia que en vez de creer a ciegas en la herencia de sus antepasados, creen a ciegas en algo que han elegido.
¿Porqué cuestionar lo que nos han enseñado?
¿Por qué no cuestionar lo que nosotros mismos nos hemos impuesto como verdad?
Este hecho se repite a lo largo de nuestras vidas n veces.
Por supuesto como veremos mas adelante José Fuentes (JF), también a pasado por cuestiones de dicha índole.

Existe en nuestra vida diferentes religiones, sectas, guru, gente, que simplemente se dedica a hacer daño (Estos son los tan afamados Falsos Profetas).
Predicando falsedades basadas en preceptos filosóficos reconocidos y de una determinada credibilidad. Este tipo de engaño es uno de los peores ya que nos hace perder tiempo, generar ilusiones, volvernos esclavos de una mentira y enredar nuestra mente.

A todo esto debemos sumarle un factor muy importante: El Tiempo.
Mientras todo esto sucede el tiempo se nos va. Y no solo eso, muchas veces hemos elegido nuestra creencia y le dedicamos todo nuestro tienpo para ir “creciendo espiritualmente” y entonces sucede lo impensable. Una lluvia de obstáculos nos llegan de pronto para que jamás podamos descubrir si el camino elegido es correcto o no. Somos simples víctimas de una lluvia de sucesos inesperados. Los ejemplos clásicos son bien simples:
Una enfermedad nos aleja de nuestra doctrina o práctica.
Un momento de fortuna que soluciona hasta el final de nuestros días nos hace olvidar completamente, que era lo que estábamos buscando en realidad.
Un momento de extrema tristeza o angustia nos hace querer abandonarlo todo y no querer creer en nada.
Pero todo esto es solo parte de un gran juego llamado distracción. Vivimos toda nuestra vida distraídos para que cuando nos podamos dar cuanta ya no nos quede tiempo, así de “doloroso” es nuestro “destino”.
Esto es parte de una realidad que no solo no queremos ver sino que la subestimamos permanentemente, para no tener que mirar lo que hay enfrente.
Como resumen podría decirse que la distracción y la falta de tiempo son tan solo unos de nuestros tantos enemigos que nos hacen casi imposible ver la verdad antes de partir.

Aquél que a encontrado el camino, no teme a la verdad.
Quién no se pone a prueba a si mismo y a su verdad, no conoce el camino.
Seven :7